Las bombas centrífugas son bombas hidráulicas que transforman la energía mecánica en energía cinética de presión a un fluido. Son capaces de aumentar la velocidad de los fluidos para que se puedan  desplazar en grandes distancias.

Son muchos los sectores que utilizan este tipo de bombas, entre ellos destaca la industria química, el sector de la automoción, la industria cosmética o la alimentaria.

Ventajas de las bombas centrífugas:

• No tienen órganos articulados y los mecanismos de acoplamiento son fáciles de usar.
• No se requiere un dispositivo regulador.
• Son fácilmente adaptables a muchas circunstancias.
• El peso es muy pequeño y sus dimensiones reducidas.
• El coste es ajustado.
• La incorporación de variadores de velocidad permite mayor eficiencia.

¿Cómo funciona una bomba centrífuga en una instalación hidráulica?

Primero, el fluido entra por el centro  del rodete de la máquina. Después, en consecuencia de la fuerza centrífuga que produce la bomba, el fluido es impulsado hacia el exterior  donde se recoge por la carcasa. Luego, el fluido es conducido hacia las tuberías de salida o hacia el siguiente rodete.

Tipos de bombas centrífugas

Podemos clasificar las bombas según varios parámetros:

1. Por la dirección del flujo:

• Radial: El fluido circula de forma paralela al eje de rotación. Son las bombas más comunes.
• Axial: El flujo circula de forma paralela al eje de rotación. Son muy eficientes a la hora de elevar grandes caudales a poca altura.
• Mixto: Combina las bombas axiales con las radiales.

2. Por la posición del eje de rotación:

• Horizontales: Los ejes de rotación están en posición horizontal.
• Verticales: Los ejes de rotación están en posición vertical.
• Inclinados: Los ejes de rotación están inclinados.

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